Planes de hoy

Ya ha pasado el fin de semana. Debo decir que ha sido un finde de relax total. Lo que es no hacer nada ni sábado ni domingo. Estar todo el día tirada en el sofá viendo pelis o series. Así ha transcurrido mi finde. El viernes varió un poco puesto que celebramos el cumple de mi amiga. Le regalamos una máquina de hacer cupcakes. La compramos en el Corte Ingles y nos costó 40e, justo el dinero del que disponíamos.

Fue una cena un tanto extraña para mí. No estaba de buen humor. El camarero hacía bromas que no me hacían ninguna gracia, en fin, un poco decepcionante la noche y ya no mencionar el frío que hacía. Iba en tirantes y me tuvo que dejar mi amiga su chaqueta.

Y ya lunes, contando los días para viajar. Diréis qué pesada. Sí, debo admitirlo y conforme se acercan los días más pesada me pongo. Ayer mi pareja apuntó en un papel lo que tenemos que hacer esta semana. ¿No os da la impresión de que siempre dejamos todo para el final?, porque yo sí. Pocas tardes entre semana hago algo pues esta semana todos los días tengo que hacer una u otra cosa.

Hoy curiosamente viene mi abuela en tren. Eso significa que tengo que ir a buscarla y pasar con ella un ratito. A mí no me importa ya que no tengo otra cosa mejor que hacer. Me fastidia que venga justo esta semana puesto que no creo que pueda ir a verla mucho. Pero aun así me dijo que cuando vuelva de vacaciones todavía estará aquí y será entonces cuando la vaya a ver. Así que tengo el tiempo justo para escribiros, prepararme e irme. Soy muy calculadora en la vida, muy organizada o como lo queráis llamar. Me gusta organizarme el día por horas cuando tengo cosas que hacer y si algo me falla me vuelvo loca. De ahí que me haya llamado a mí misma calculadora.

Lo que más pereza me da de ir a buscar a mi abuela es que tengo que ir en coche. Y pensaréis si no hay mejor transporte, cosa que yo también creo pero es que este coche tiene un pequeño problemita y es que cuando enciendo el aire acondicionado empieza a hacer unos ruidos curiosos para aquellos que pasen al lado de él. Vamos que voy llamando la atención cosa que no me gusta. Así que o me aso de calor o voy chirriando como una bicicleta vieja pero a lo bestia. A decir verdad creo que prefiero ir chirriando. Mañana os cuento como me ha ido.